sábado, 31 de mayo de 2014

Cómo vestir a los nenes para La Parada #PRparade

 Se acerca el gran día de la madre de las paradas en Nueva York, el domingo de La Parada Puertorriqueña (8 de junio). Como cada año, la 5ta avenida se vestirá de los colores de nuestra mono-estrellada bandera, la "bonita bandera" y nunca falta el que se viste de bandera de pies a cabeza. Y no es fácil de controlar, ese deseo de volverse uno con la bandera, de envolvernos en ella y salir caminando. Pero antes de que te tropieces, aprovecha esta oportunidad para involucrar a tus hijos en el proceso de decidir qué ponerse y para educarlos un poco acerca de nuestra historia, nuestras raíces y ¿como nó? ¡nuestra bandera! Porque después de todo, la bandera se lleva en el corazón.

Ella se llama Taína

LOS COLORES DE LA BANDERA
No tenemos que comprar una camiseta con la bandera: utiliza los colores de la bandera como inspiración. Pídeles a tus niños que te ayuden a buscar piezas de ropa en su propio armario: aquellos pantalones cortos rojos, el gorrito azul... y poco a poco tendrás un ajuar representativo de la bandera. Cuéntales detalles cómo el hecho de que nuestra bandera simboliza la hermandad en la lucha revolucionaria entre el pueblo cubano y el puertorriqueño. O el hecho de que la bandera fué diseñada para el 1895 por un grupo de puertorriqueños en Nueva York.

Tenoch viste piezas de The Childrens Place y Taína un traje de Sophie Rose

HERENCIA AFRICANA
La bandera roja, azul y blanca es la superficie de nuestra historia blanca, negra y marrón. ¿Porque no vestirlos inspirados en símbolos Africanos o Taínos? Con dos retazos de tela que compré el año pasado en el festival Dance Africa en BAM Brooklyn, les hice un pantalón y una falda a mis niños. Combinado con colores intensos como rojo y negro les voy contando un poco sobre nuestra inevitable historia de esclavitud y sangre... en la medida en que sus corazones jóvenes puedan entender. Luego les leo el "Majestad Negra" de Luis Palés Matos y aquí les comparto un poco:

Por la encendida calle antillana, va Tembandumba de la Quimbamba
--Rumba, macumba, candombe, bámbula--- entre dos filas de negras caras.
 
Ante ella un congo--gongo y maraca-- ritma una conga bomba que bamba.
Culipandeando la Reina avanza, y de su inmensa grupa resbalan
 
Meneos cachondos que el congo cuaja en ríos de azúcar y de melaza.

Tenoch y Taína llevan piezas hechas de retazos de tela de motivos Africanos

HECHO A MANO
No compres nada, ni te vistas de bandera. Saca el pincel y pinta en una camiseta cualquiera un coquí Taíno o una estrella o el sol Africano o hasta la bandera. Deja que te ayuden y que se ensucien de pintura... Cuéntales lo que es el coquí y cómo su canto nos acurrucaba en la noche, y de cómo no puede vivir fuera de su islita. Que se combinen la camiseta pintada a mano con azul, o con violeta, ¡que importa! Canta con ellos "Que bonita bandera, que bonita bandera, que bonita bandera es la bandera Puertorriqueña"... Porque no importa cómo vistan, lo importante es llegar allí el domingo y llevar la bandera en el pecho o en la mano, sin que nunca falte en el corazón.

Taína lleva un coquí enfrente de la camiseta y un sol atrás. Tenoch pintó su propia estrella
(y para poder retratarlos chuparon paletas)
 
           






Esta pieza es dedicada a los esfuerzos sobrehumanos del Nuevo Comité del National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), y mis panas @UrbanJibaro y @CapicuCulture.

martes, 27 de mayo de 2014

A Puerto Rican Renaissance, by George Torres

Esta pieza es compartida con el auspicio de National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), sin embargo las opiniones expresadas, ideas y concepto son de la autoría de George Torres.

It does not matter how old I get, or how many times I have marched down 5th avenue... it still means the world to me. When I walk down that street and see the sea of red white and blue, I feel like the most important person in Nueva York!
 
I figured out why... it is because I am a proud Puerto Rican. 
I cannot say that the walk has always been an easy one, as there have been moments that I have questioned exactly why I march. The reasons are too many to discuss in this post but the end result is always the same. I will walk again... because I am an ambassador for Puerto Rican (and Pan-Latin) culture in our community and with that role comes the responsibility of helping people reconnect with their roots. It is my responsibility to not only march but do my part in helping this institution accomplish it's mission. Despite all the adversity, I stand with this new board in support of their commitment to bring our culture back to the forefront of the parade.


I really believe that this year will be the beginning of a Puerto Rican Renaissance here in NYC.
So as we approach June 8th...I have a special ask... 
I ask the we take our families to 5th Ave in NYC to celebrate our cultural heritage in a positive way. Yes, I am asking for recommitment to preserving our culture and traditions.  I am asking that you do not buy anything that desecrate our beautiful flag. I am asking that on the way to the parade, you share stories with the children in your family about the things mami and wela taught you. I am asking that you talk about Papi and welo and how they adapted to life in NYC. I am asking that you teach the kids about the historical contributions that the Puerto Rican community have made in the United States. I am asking that you teach them why we have the biggest and most beautiful cultural celebration that NYC has ever seen... and why today it is so important that we support it and make it better. I am asking because ultimately... it all starts with you... with me... with us.
Over the next two weeks... I will be coordinating a VIRTUAL PARADE on social media with #TeamCapicu (my army of social media reporters) and we will highlight Puerto Rico on Twitter, Facebook and Instagram using the #QueBonitaBandera hashtag. This parade is inspired in part by the great work Marixsa is doing to raise the level of "conciencia" in our community with #AbrazosBoricuas


Follow the hashtag, share the content but most importantly... discuss it with your friends and family so that we can continue to grow as a people without losing sight of our beautiful heritage.
¡Que Viva Puerto Rico!
A la orden siempre...
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George Torres (aka Urban Jíbaro) is a community builder who presents, promotes, and preserves Latino culture via new media. He was raised between Brooklyn, New York and Bayamón, Puerto Rico and inspired by his grandmother, Gloria del Rio, who dedicated her life to political action community advocacy for Latinos and was also a master of her cocina. George is the creator of Sofrito For Your Soul, a website originally conceived as a personal journal, pre-dating blogs, it was meant to document his college experience and his affinity for poetry. Sofrito For Your Soul eventually grew into a website that highlighted our culture beyond campus and eventually gained an international audience.  
His most recent partnership has been a collaboration with Juan PaPo Swiggity Santiago, with whom in 2007, after 8 years of sharing ideas, CAPICU! Cultural Showcase was created. Combining their community building abilities, CAPICU! produce diverse poetry and performing arts events in New York City. Their mission is to create a self-sustaining institution that will cultivate media savvy amongst successful business people in the arts circle. You can find George Torres on Facebook, Twitter and Instagram. Follow also Capicu Culture on Facebook, Twitter and Instagram. 

martes, 20 de mayo de 2014

Cómo 'jibarizo' a mis dos Boricuas de pura cepa, por Mayra Rodríguez

Esta pieza es compartida con el auspicio de National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), sin embargo las opiniones expresadas, ideas y concepto son de la autoría de Mayra Rodriguez.

Yo tengo dos jibaritos que Dios me dio y que nacieron en San Juan...de la loza...pero se criaron en Luquillo. Desde que nacieron estuvieron probando la linda Islita que los vio nacer. A las dos semanas de nacido, llevamos al mayor a la playa de Piñones a que plantara bien sus pies en la arena y le cambiamos el "pamper" sobre los bloques del fogón de un kiosquito abandonado. Con el menor nos fuimos de vacaciones tierra adentro a Adjuntas a una casa de madera tradicional cuando sólo tenía un mesesito de nacido. Estos dos tienen la mancha de plátano bien marcá porque le enseñamos lo lindo de ser de Puellllto Rico aunque a los 7 y 5 años tuvimos que aventurar a vivir fuera del Mar Caribe.

Pues una cosa llevó a la otra y nos fuimos a vivir a Astoria, Nueva York por dos años. Vivimos mil aventuras, conocimos mucha gente linda y compartirmos con los primos y tíos. Pero también, empezamos a extrañar todo eso que uno da por sentado y no sabe que tiene como Boricua. Al comparar y extrañar, se da uno cuenta de que ser Boricua establece en uno costumbres, pensamientos, modales, conductas y hasta deseos espontáneos de salir a la playa o menearse en una hamaca. ¿Qué me dicen de dormir sin los coquíes? 
Con mis nenes hablaba todo eso y ellos me contaban que les hacía falta el patio, el carro, las visitas imprevistas de los primos y abuelos y los paseítos por la Isla. Mi familita, se adaptó exteriormente a la nueva realidad, pero internamente siguió siendo Boricua. Hablamos en español en casa 100% ¿Cómo le voy a decir "I love you" a esos dos platanitos fritos que tengo en casa? El idioma les ha preservado el calorcito de puertorriqueño, los cariñitos usuales y esos "te quiero mucho Mamá" no los quiero traducidos. 


Nuestra iglesia quedaba en la 6ta avenida con la calle 57 en pleno Manhattan, pero esta jibarita con uno de mis jibaritos...nos escapamos rápido cuando se acabó el servicio y nos instalamos en la 5ta avenida a ver nuestra primera Parada Puertorriqueña en Nueva Yolll.  ¡Cómo se le sale a uno el corazón cuando ve tanta bandera Boricua junta y oye su acento por doquier! Pasaban las carrozas y de momento vemos nada más y nada menos que a El Gran Combo montados en una de ellas. ¡Na más! Y uno con "los pelos para'os" con esas canciones de salsa que ha oído desde siempre. Salimos con una bandera y comiendo helados de coco y piña.

Las aventuras continuaron. Ahora  hemos vivido varios añitos en Los Angeles, California, mis hijos han hechado raíces, están en pequeñas ligas y yo disfrutando del calorcito de acá que lo agradezco un montón. A cada rato nos ponemos a ver los videos de cuando estábamos en Puerto Rico y todos los cumpleaños que hicimos y que fuimos. Su inglés ahora es más lindo que el mio, pero su español sigue intacto. Se sienten puertorriqueños puros, pero se han integrado muy bien a nuestro nuevo hogar. En casa se come arroz con habichuelas y ya aprendieron a hacer quesitos y pastelillitos de guayaba. Mi esposo les hace mofongo y Lucas siguió la receta de polvorones y le quedaron más bien que el cará.

La cultura entra por la cocina y por los oídos también. Ellos saben que a mí lo que me gusta es la música movida...salsa y el merengue dominicano prestao también. En el carro les pongo mis CDs y ya se saben varias de Wilkins del CD donde tiene el afro en la carátula y que tanto recuerdos me trae de mi niñez. A mi hijo mayor le fascinan nuestras historias de cuando jugábamos en la calle y dice que le hubiera gustado vivir en 'mi tiempo' porque hicimos muchas cosas chéveres. Ambos son bien ochentosos en sus gustos y viven su vida de Boricuas a través de nuestras historias y de los lindos recuerdos que tienen de su niñez.


Ahora hablando en 'arroz y habichuelas' mis nenes siguen bien jibaritos en su forma de ser, de hablar y de pensar porque no hemos dejado de inculcarles el saber de dónde vienen. Son bien flexibles porque pueden comprender y aceptar tanto a uno que viene de afuera como a los americanos. Conocen las diferencias, pero saben integrarlas y funcionar perfectamente en ambas. La lectura en español es imprecindible, y ya se han leído cuentos de Juan Bobo y de los taínos.  Saben de Roberto Clemente, de Roberto Alomar, y de los artistas de Puerto Rico. Nos compramos el DVD de Una Mirada a Puerto Rico para disfrutar de la Islita desde arriba, pero la conexión constante con sus abuelos cuando visitan con una libra de pan sobao en la maleta, cuando se llaman o  cuando hacen Facetime les mantiene el corazoncito manchaíto de plátano y la mirada puesta en las olas del Caribe.

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Mayra Rodríguez es una madre educadora en el hogar de dos niños y está felizmente casada con su mejor amigo: su esposo. Al crear su blog, Estilo Familiar, Mayra quería demostrar que podemos dejarle un legado a nuestros hijos mediante la educación y experiencias enriquecedoras que los dirijan a utilizar sus talentos y destrezas para cumplir sus sueños. Además, dejarles ver que dentro de la familia podemos encontrar nuestra fuente de inspiración y llenura. Acompáñala leyendo sobre las aventuras de su vida, de los momentos buenos y no tan buenos, de su búsqueda por buscar recursos educativos, de su amor por las artes manuales y por sorprender a su familia con platos ricos, originales y nutritivos. Ella es también la experta de Cocina Latina en About.com. Puedes encontrarla en las siguientes redes sociales: Facebook, Twitter, Instagram, Pinterest y Google+.

martes, 13 de mayo de 2014

Con la bandera en mano y la patria en el corazón, por Yadira Ambert


Esta pieza es compartida con el auspicio de National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), sin embargo las opiniones expresadas, ideas y concepto son de la autoría de Yadira Ambert.

Hace más de 20 años salí de Borinquen, mi isla del encanto, Puerto Rico.  Y como dicen por ahí el tiempo pasa volando. Pero en mi mente está el recuerdo de ese día en que le dije adiós a mi isla, mi familia y amigos.

Para ser bien honesta, no quería salir de allí. Lo tenía todo. Mi casa donde crecí, mi familia, mis amigos y mi novio. No tenía el más mínimo deseo de mudarme a la Florida. Pero no podía quedarme, tenía que seguir a mis padres. Desde ese momento comenzó un período en mi vida donde le cerré las puertas a todo incluyendo a mi isla.

Tenía a penas 19 años cuando me mudé. Vine en una edad donde uno se está formando como adulto y lo menos que tenía en mente era el guardar en mi corazòn mi patria. Me encerré en mis estudios, en formarme como persona y dejar todo atrás.

De vez en cuando visitaba Puerto Rico, y aunque estaba felíz de ver mi familia, no era lo mismo. No me sentía puertorriqueña. Todo era diferente para mí. Y tan pronto regresaba, tenía que volver a "empezar" y quitarme la isla de "encima", por eso decidí no regresar.

En el 2004, tuve la oportunidad de trabajar en el Festival de la Parada Puertorriqueña en NY. Fue una experiencia única. Este festival, levantó un sentimiento de remordimiento en mí ya que no entendía porque aquella gente que no habían nacido en MI ISLA sentían orgullo de ser Boricua. Ellos no podían ser más Boricua que yo. ¡Eso jamás!


 
Y a la vez, me sentí bien avergonzada ya que yo no sentía el mismo amor, el mismo orgullo y la misma pasión que ellos. ¿Qué me estaba pasando? No fué hasta que escuché la canción de Rubén Blades, "Patria" que por fin entendí lo que me estaba pasando.



“Hace algun tiempo me preguntaba un chiquillo 
por el significado de la palabra patria 
me soprendio con su pregunta y 
con el alma en la garganta le dije asi:

Flor de barrio, hermanito Patria, son tantas cosas bellas 
como aquel viejo arbol que nos habla y renueva 
como el cariño que guardas despues de muerta la abuela 

Patria son tantas cosas bellas son las paredes de un barrio 
de su esperanza morena es lo que lleva en el alma 
como aquel cuando se aleja son los martires que gritan 
bandera, bandera bandera bandera 

No memorices lecciones dictaduras o encierros 
la patria no la define los que suprimen a un pueblo 
la patria es un sentimiento en la mirada de un viejo 
son la entera primavera brisa de hermanita nueva 
te contesto, hermanito, Patria son tantas cosas bellas.”


Por muchos años, me sentí mal. Quería revivir ese sentimiento de amor a mi patria. Pero al tener mi hijo, todo cambio. Fue cuando me di cuenta que mi patria la LLEVABA EN MI CORAZON. No tenía que vestirme de los colores azul, blanco y rojo, no tenía que escuchar o solo hablar español en casa porque simplemente dondequiera que voy, llevo mi frente en alto y digo con orgullo: "YO SOY BORICUA, PA' QUE TU LO SEPAS."

Y sueño con algún día llevar a mi familia a la Parada Puertorriqueña en NY para que podamos llenarnos de esa energía y orgullo de sentir que llevamos la "mancha de plátano" dentro y que dejamos nuestro corazón en Puerto Rico. Aquí les dejo con algunas imágenes de nuestro ultimo viaje en familia a Puerto Rico.

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Yadira Ambert es una influyente bloguera latina y fundadora de El Club de las Diosas. Su blog se enfoca en temas centrales como la educación, la salud, concursos, recetas, opiniones y temas de belleza, todo a través de los ojos de una mujer latina. Yadira, una madre puertorriqueña, estimada bloguera, es dueña de Innovative Latina Media, es cofundadora de Social Influenz Network, es una profesional de mercadeo y es vocera de las conferencias Hispanicize y Niche Parent. Ella ha residido en la Florida desde hace casi 20 años. Puedes encontrarla en las siguientes redes sociales: Facebook, Twitter, Pinterest, Youtube, e Instagram.

martes, 6 de mayo de 2014

Mi bendita mancha de plátano, por Madelyn Rodríguez

Esta pieza es compartida con el auspicio de National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), sin embargo las opiniones expresadas, ideas y concepto son de la autoría de Madelyn Rodíguez.

Es increíble cómo,  cuando uno sale de su país natal, uno se vuelve más patriota que la misma bandera. Aunque nací y fui criada en Puerto Rico, al tener papá cubano, siempre me he sentido un poquito de aquí de Puerto Rico y un poquito de allá. Crecí viajando mucho  por todos los Estados Unidos, Canadá, México, República Dominicana, Venezuela, Europa, pero especialmente visitando a mi familia paterna que estaban radicados en Nueva York y en Miami. Siempre siguiendo la filosofía  de que "nadie te quita lo bailao". Y aunque era gracioso el que las personas enseguida nos preguntaran si conocíamos a algún Menudo al enterarse de que éramos de Puerto Rico, nunca, nunca extrañé el arroz con habichuelas ni quería regresar de ningún viaje.

En Puerto Rico, mis gustos musicales eran claros –música americana 100%, escuchando 95X en la radio. ¡Yo era una rockera de verdad! Los cocolos, o aquellos que escuchaban salsa, eran esos otros con los que no nos gustaba hangear. Comer pizza, sándwiches o alguna otra chuchería era la moda en esas edades universitarias. Eso de comer comida criolla, para nada. La televisión que veía eran los sitcoms de las cadenas norteamericanas –Cosby Show, Who’s the Boss y Full House– y las discusiones que se formaban cuando alguien quería ver TV en español en la casa.

Madelyn Rodríguez de Karma-Free-Cooking.com
Cuando me preguntaba la gente – ¿de dónde te sientes? ¿de dónde eres? Siempre hacía la salvedad que les comenté anteriormente. Nunca me sentía que era completamente puertorriqueña… Hasta que me mudé por un tiempo a vivir fuera de Puerto Rico. Tuve la gran oportunidad de estudiar mi maestría en Chicago y esos estudios me llevaron a aceptar un trabajo en La Gran Manzana… en NUEVA YORK. Una ciudad que visitaba posiblemente año tras año y ahora se me estaba dando la oportunidad de VIVIR allí.

 Pero al mudarse uno fuera de Puerto Rico, al saber que estarás meses sin pisar tierra boricua, hay un switch que se le prende a uno que es difícil de apagar.  Es algo inconsciente y automático.  Yo no lo puedo explicar.  Aunque muchos de mis compañeros de escuela y de trabajo eran norteamericanos, empecé a buscar amistades latinas para poder hablar y expresarme libremente en español.

Mensualmente teníamos fiestas latinas donde la única música que se escuchaba eran merengues y salsas. Juan Luis Guerra y su 4.40, Gilbertito Santa Rosa y Jerry Rivera eran los reyes indiscutibles de la banda sonora de nuestras vidas en aquella época.  Tuve novios que no podían entender como YO podía saberme de memoria todas las letras del disco de Jerry Rivera…  YO, quien sólo escuchaba música americana en Puerto Rico. Mi compañera  de cuarto sabía que cuando el disco Romance de Luis Miguel estaba puesto, no se me molestaba. 

Fueron innumerables las veces que fuimos en búsqueda del “mejor mofongo” en Manhattan, cogí clases de salsa para aprender a dar vueltas complicadas en esos salones de baile en Chelsea y me invitaron a mi primera parada puertorriqueña en Nueva York.  ¿¿¿Qué,  qué???  Yep, en el 1994, hace exactamente 20 años atrás,  tuve el honor de sentarme en los bleachers de la Quinta Avenida para presenciar mi primera Parada Puertorriqueña.  Fue una experiencia genial.  Posiblemente una de las experiencias que me hicieron comenzar a extrañar mi Puerto Rico y a considerar regresar vivir en la Isla.

Porque cuando se nace y se cría en Puerto Rico, uno es realmente bendecido.  Y muchas veces uno no se da cuenta de lo que tiene hasta que lo separan de eso… nuestras playas, nuestro clima, nuestra naturaleza y hasta nuestra gente.  Y te das cuenta de lo mucho que es parte de ti, de lo mucho que lo quieres, de lo mucho que te hace falta cuando estás lejos.  Vivir en Nueva York y estar entre tantos compatriotas puertorriqueños – seamos de aquí o de allá– hace que uno sienta una conexión especial con este pedacito de tierra 100 x 35.

Me di cuenta que esa “mancha de plátano” está bien arraigada en mí y que no quiero que se me vaya.  Estoy muy orgullosa de mis raíces y de mi cultura.  Y ahora, cuando viajo alrededor del mundo, soy una embajadora de mi Puerto Rico, celebrando todo los que nos hace el pueblo que somos, especialmente nuestra gastronomía.   Y a través mi blog, KarmaFree Cooking, comparto muchas de las recetas que celebran lo que es ser de Puerto Rico.  Y para todos aquellos lectores de Mamá Boricua en Brooklyn, que veces se pueden sentir desconectados con su propia “mancha de plátano”, les brindo una receta que espero les guste y les alimente tanto su panza como su espíritu boricua:


CANOAS DE PLÁTANO MADURO 
RELLENAS DE ESPINACAS


INGREDIENTES
4 plátanos maduros
1 bolsa de espinacas bebés frescas
1 cebolla mediana, picadita
1 diente de ajo, machacado
4 onzas de queso crema
un chorrito de half & half o de leche
una pizca de nuez moscada
2 cdas de piñones (pine nuts), tostados
1 taza de queso mozzarella rallado
aceite de Oliva
sal y pimienta a gusto


PROCEDIMIENTO
  1. Asa lo plátanos en su propia cáscara en el horno…  pica un poquito las puntas del plátano y le haces un tajo de una punta a la otra, por la parte de adentro, para que el plátano tenga espacio de expandirse mientras se cocina.  Los horneas sobre una bandeja de hornear cubierta con papel parchment por 30 minutos a 350F. 
  2. Mientras se cocinan los plátanos, preparamos el relleno de espinacas…  En un sartén grande a fuego mediano agrega un chorrito de aceite de oliva y cocina suavemente las cebollas picaditas.  Añade el diente de ajo para que el aceite y la cebolla se permeen con el sabor del ajo, pero sin que se queme. 
  3. Cuando las cebollas estén blanditas, cocidas y translucidas, remueve el diente de ajo y añade los puñados de espinaca fresca. Puede parecer mucha en el sartén, pero con el calor se van a hacer nada. Si deseas, puedes ayudar tapando el sartén por unos minutos. Menea bien la espinaca con las cebollas para que se mezclen bien y se junten los sabores.
  4. Añade el queso crema en pedacitos para que se te haga más fácil incorporarlo a las espinacas.  Si encuentras que la mezcla está muy apretada, agrega un chorrito de leche o half & half.   Sazona bien con sal, pimienta y un poquito de nuez moscada. Debes tener una mezcla de espinaca cremosita.
  5. Cuando los plátanos estén cocidos, remuévelos de sus cáscaras y coloca los plátanos en moldes de hornear.  Puede ser un molde de cristal cuadrado que te quepan los 4 plátanos uno al lado del otro. O los puedes colocar en platos alargados como de lasaña individuales, si prefieres. Yo hasta he usado unos ramekins llanos que tengo y funcionan de lo más bien.
  6. Coloca los plátanos con su curvatura natural hacia arriba. Si le hiciste el tajito a la cáscara por ese mismo lado, ahora, haz ese tajito más profundo para que rellenes el plátano de ese lado. Coloca una ¼ parte de la mezcla de espinacas sobre cada plátano. Esparce los piñones por encima de cada plátano y cúbrelos con el queso rallado. 
  7. Vuelve a colocar en el horno a 350F por unos minutos hasta que el queso se derrita y se dore un poco. Disfrútalas con una ensalada verde o un buen arroz guisado con maíz.
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Madelyn es una lacto-vegetariana, viviendo en San Juan, Puerto Rico. Ella se convirtió en vegetariana después de comenzar a practicar yoga seriamente 10+ años atrás. Fue gracias a las enseñanzas del yoga que desarrolló una mayor apreciación por la cocina y desarrollar recetas que se ajustaran a su nuevo estilo de vida. Para Madelyn, ser vegetariana va más allá que simplemente no consumir carne o productos animales. Tiene que ver con llevar un estilo de vida lo más natural y orgánico posible – evitar refrescos carbonatados, aditivos y medicamentos químicos, productos enlatados o comida que haya sido cocida hace mucho tiempo, entre otros. Cansada de escuchar la mala reputación que tenía la cocina vegetariana por ahí, en el 2007, comenzó el blog vegetariano KarmaFree Cooking para compartir su estilo de vida vegetariano y presentarlo como una opción deliciosa, saludable y fácil de integrar a cualquier estilo de vida. Puedes interactuar con KarmaFree Cooking en Facebook, en Twitter, en Pinterest y en su versión en español, KarmaFree Cooking en Español

lunes, 5 de mayo de 2014

Los martes de mayo son martes de abrazos


Esta campaña es una colaboración con los autores independientes de karma-free-cooking.com, clubdelasdiosas.com, estilofamiliar.com y sofritoforyoursoul.com. La iniciativa se debe gracias a el auspicio de National Puerto Rican Day Parade Inc. (www.nprdpinc.org), sin embargo las opiniones expresadas, ideas y concepto son míos y de los escritores independientes de cada blog antes mencionado.

Ya se acerca la fecha de la Parada Puertorriqueña, a sólo un mes, Junio 8 está a la vuelta de la esquina. Y es por eso que este mes lo dedico a un compartir de voces y de ideas, de Boricuas de aquí, de allá y de diferentes partes. Cada martes de mayo compartiremos un abrazo de escritores, pensadores y seres humanos que respeto y amo; ellos nos regalaran un post que recoge la escencia de lo que son y lo que aman para compartirlo con nosotros con motivo de la Parada.

¡Nos esperan abrazos de Puerto Rico, de California, de la Florida y del Bronx... Y LOS DE TODOS USTEDES! Porque el 8 de junio es un día para celebrar la cultura y riqueza Boricua en el mundo entero. Cuento con tu apoyo, respaldo y brazos para devolver el abrazo.

Un abrazo cariñoso desde Brooklyn,

Marixsa
Mama Boricua en Brooklyn